Hoy vas a leer la mejor Buena Noticia que te hará bailar, cantar y saltar de emoción. Se ha comprobado científicamente que ir conciertos y festivales musicales mejorarán tu salud.

De acuerdo con una investigación realizada por Patrick Fagan, profesor de la Universidad de Goldsmith y experto en ciencias del comportamiento y la sala de conciertos británica O2, tan sólo 20 minutos en un concierto cada quince días “puede suponer un aumento del 21% en la sensación de bienestar”. 

Y es que asistir a un concierto siempre trae consigo una gran experiencia, no sólo por la parte en la que escuchas la música que tanto disfrutas, sino porque lo haces en vivo, entre miles de personas viendo a tu artista o banda favorita cantando a gritos, bailando y saltando. Esa sensación es única, llena de euforia, recargando energía y a la vez liberando el estrés.

Lo resutados de esa investigación arrojó que ir a un concierto le ganan a la práctica de yoga, que es de un 10%, o el de pasear o pasar tiempo con alguna mascota, un 7%.

El efecto de la música en directo, mejoró hasta en 25% los sentimientos de autoestima y de comunidad. Igualmente, la estimulación mental fue la más beneficiada, con una mejora del 75%. 

En el estudio las personas participaron en varios análisis psicométricos y de ritmo cardíaco mientras realizaban múltiples actividades. Otros datos incluidos en el informe son que los altos niveles de bienestar que aumentan la esperanza de vida hasta nueve años, lo que apuntaría a una relación directa entre la asistencia a conciertos y la longevidad. 

El Royal College of Music y el Imperial College London de Reino Unido explicaron que asistir a un concierto reduce los glucocorticoides, la progesterona y los niveles de cortisol, considerada la principal hormona del estrés; la cual aumenta la glucosa en el torrente sanguíneo y altera las respuestas del sistema inmunitario. También suprime el sistema digestivo, el sistema reproductor y los procesos de crecimiento.

Mientras que un reporte de NeuroImage estableció que puede apreciarse sincronía entre en la actividad cerebral del público y del artista o banda. Cuanto mayor es el grado de sincronía, según el estudio, más disfruta el público de la actuación; lo que según el documento, demuestra que la experiencia musical es profunda. Bailamos y sentimos las mismas emociones juntos, y las neuronas también se “encienden” juntas. Así que a asistir a conciertos para vivir mejor y más tiempo.

Mientras Rihana daba cátedra en su espectáculo rodeada de bailarines del más alto nivel, del otro lado del campo, estaba Justina Miles, una joven de 20 años, afroamericana y con deficiencia auditiva, interpretando para millones de personas las canciones de Riri … Pero a señas. Fue tal su energía y el nivel de su presentación, que en redes sociales pronto notaron su talento.

 Miles, ha hecho historia pues con esta presentación se ha convertido en la primera mujer con sordera presentándose en el espectáculo del medio tiempo del #SuperBowl.

Previo a su presentación, ella declaró: “Valoro la oportunidad de hacer posible que todas las personas sordas disfruten de estas canciones y que no se pierdan la experiencia completa del Super Bowl”. Además, dijo que espera que su presentación inspire a otros y que no permitan que los obstáculos, se interpongan entre ellos y sus sueños.

Además, dijo que espera que su presentación inspire a otros para que no permitan que ningún obstáculo se interponga entre ellos y sus sueños, pues si ella lo logró, aseguró, cualquiera puede.