¿Sabías que el legendario Paul McCartney fue quien “convirtió” a Lisa Simpson en vegetariana para siempre

Sucedió en 1995, cuando el famoso episodio en donde Lisa, la vegetariana estaba en producción, los creadores de Los Simpson querían contar con McCartney como estrella invitada. Sin embargo, el ex Beatle tenía una condición muy clara: Lisa debía quedarse vegetariana de por vida. “Si aparezco, Lisa no puede volver atrás”, exigió Paul.

Desde su creación en 1987, Los Simpson ha sido una serie pionera en abordar temas que van desde política hasta hábitos alimenticios. Pero pocos episodios han sido tan influyentes como el de Lisa, la vegetariana, que introdujo un cambio permanente en uno de los personajes principales. Y casi 30 años después, Lisa sigue siendo vegetariana, cumpliendo con la promesa hecha a Paul.

El director de la serie, David Mirkin, había pensado en que Lisa solo experimentaría el vegetarianismo temporalmente. Sin embargo, una vez que surgió la posibilidad de tener a McCartney, Mirkin no dudó en hacer el cambio definitivo. “La idea de traer a Paul era perfecta para abordar temas como el respeto a los animales y la alimentación consciente”, explicó el director en una entrevista.

Este episodio no solo transformó a Lisa, sino que inspiró a muchos jóvenes a explorar el vegetarianismo, convirtiendo la decisión de Lisa en un símbolo dentro de la serie. “Gracias, Paul McCartney, por usar tu voz para el cambio y por recordarnos que todos podemos marcar una diferencia”, comentaron los fans en redes.

Actualmente, Los Simpson siguen haciendo historia con su temporada número 36, que comenzó con la participación de John Cena y una sorpresa: un “final de la serie” falso que dejó a los espectadores en shock. Fox aseguró que este final fue una broma, con Conan O’Brien explicando en el episodio que “Fox ha decidido terminar con Los Simpson… pero fue una inteligencia artificial la que imaginó ese final”.

Con más de tres décadas de historias, Los Simpson no solo nos hacen reír; también nos invitan a reflexionar, y parte de esa magia se la debemos a momentos como el de Lisa y McCartney.