Johnny Depp no solo es conocido por ser un actor talentoso, sino también por su generosidad. Su última sorpresa fue el pasado mes de septiembre de 2024 en San Sebastián, España, donde, con motivo de la presentación de su película como director en el Festival de Cine, se convirtió en el Capitán Jack Sparrow para alegrar el día de los niños hospitalizados en el Hospital Universitario Donostia.

Este gesto no solo hizo sonreír a los pequeños, sino que dejó una huella emocional que será recordada durante mucho tiempo. Vestido con su característico atuendo de pirata, Depp recorrió la planta infantil y de oncología del hospital, protagonizando una escena que parecía sacada directamente de las películas de Piratas del Caribe. Con sus bromas, guiños y pedorretas, el actor se mostró espontáneo y cercano, causando asombro y risas entre los niños y su familias. Uno de los momentos más divertidos fue cuando un niño le preguntó dónde había dejado su barco. Depp, fiel a su personaje, respondió: “Tuve que venderlo para comprarme el diente que me faltaba”, provocando risas entre los presentes.

Pero lo que realmente marcó la diferencia fue el calor humano de Johnny Depp. En un gesto que reflejó su conexión genuina con los pequeños, un niño pidió repetir el choque de palmas que había hecho con el actor, hasta que la mano de Depp quedó roja por la fuerza con la que el pequeño golpeaba. “Gracias, amigo”, le dijo Depp en perfecto castellano, dejando una sonrisa en el rostro del niño y en el de todos los presentes.

Este acto de generosidad es solo un ejemplo de las visitas que Depp ha hecho a hospitales alrededor del mundo, demostrando que su corazón es tan grande como su talento. Aunque su aparición no fue parte de una película ni estuvo rodeada de cámaras, para esos niños, fue una verdadera escena de cine.

Shaquille O’Neal, la leyenda de la NBA, demostró que su corazón es tan grande como su estatura al visitar Ecatepec, Estado de México, para regalar 500 pares de tenis a niños de bajos recursos. En una muestra de generosidad y humildad, O’Neal, quien lanzó su marca de calzado en México en colaboración con la tienda Coppel, llegó personalmente a entregar los zapatos a los jóvenes, quienes no podían contener su emoción al ver a uno de sus ídolos en persona.

“No he jugado desde 2011, pero ver que estos chicos todavía saben quién soy, me asombra”, comentó el exjugador de los Lakers, mientras compartía un momento único con los niños. Shaq recorrió el lugar repartiendo su modelo de calzado, The Devastator, que, según él, combina rendimiento y estilo urbano. Con un precio accesible desde 849 pesos, O’Neal y Coppel buscan que estos tenis estén al alcance de todos, desde deportistas hasta quienes buscan algo cómodo y moderno. “Haremos zapatillas deportivas accesibles para niños en todo el mundo”, añadió.

Además de calzado, Shaq se llevó algo más de su visita a México. Al pasar su adolescencia en San Antonio, Texas, se familiarizó con la cultura mexicana y hoy en día es un fanático de los tacos, fajitas y pan mexicano. “La conexión que tengo con México es real. Esto es solo el comienzo”, aseguró O’Neal, quien ve en México una oportunidad para expandir su marca y también para hacer el bien.

La marca Shaq no es nueva en el ámbito de la filantropía: ha regalado bicicletas, videojuegos y albercas inflables a miles de niños en Estados Unidos, siempre buscando dar un poco de alegría a quienes lo necesitan. “Decidí que era momento de hacer negocios en México y me siento agradecido de haber estado aquí para repartir algunas zapatillas a esos niños que lo necesitan”, afirmó el empresario, cuya fortuna ronda los 500 millones de dólares gracias a su éxito en los negocios.

Durante su estancia en México, Shaq también recordó con una sonrisa a Jaime Jáquez Jr., jugador mexicoamericano de la NBA, quien en un concurso de clavadas llegó a saltarlo. “Es un jugador fabuloso, le deseo mucho éxito. Ha hecho mucho por su familia y por su cultura”, comentó con admiración.

Con esta visita, O’Neal reafirma su compromiso con la juventud y con aquellos que ven en el deporte una salida. Para muchos niños en Ecatepec, recibir un par de tenis de Shaq no fue solo un regalo, sino un recordatorio de que los sueños, incluso los más altos, están al alcance.

Un avance sin precedentes en la medicina ha sido logrado por investigadores del Laboratorio de Inmuno-regulación del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid. Han desarrollado una innovadora terapia celular utilizando células thyTreg (Treg), diseñadas para prevenir el rechazo inmunológico en trasplantes cardiacos infantiles y prolongar de manera indefinida la vida útil del órgano trasplantado. Hasta la fecha, esta terapia ha sido probada con éxito en siete bebés trasplantados de corazón.

Los resultados preliminares de esta investigación son alentadores. Una única administración de la terapia celular ha demostrado ser capaz de restablecer el equilibrio inmunológico y prevenir el rechazo agudo del órgano trasplantado en niños. Estudios recientes han confirmado que el sistema inmunológico tiene un mecanismo intrínseco de regulación, mediado por células T reguladoras o Treg, que controlan y reducen las respuestas inflamatorias inapropiadas.

Irene, una pequeña de seis meses con una cardiopatía congénita, se convirtió en la primera paciente en el mundo en recibir esta terapia innovadora después de su trasplante de corazón en el Hospital Gregorio Marañón. A la semana de recibir su trasplante, a Irene se le administró una única dosis de sus propias células thyTreg. Durante dos años, se ha llevado a cabo un seguimiento exhaustivo para evaluar la eficacia de esta terapia en reducir el riesgo de rechazo del nuevo órgano.

Los resultados han sido extraordinarios. “Durante estos dos años, Irene ha mostrado tener en su sangre una reserva de células Treg superior a la de otros niños trasplantados de corazón que no habían recibido la terapia thyTreg. La presencia de estas células ha mantenido bajo control los mecanismos inmunológicos que podrían desencadenar el rechazo”. No se ha detectado ningún signo de rechazo en Irene durante estos dos años post-trasplante, un periodo crítico con alta incidencia de rechazo en estos pacientes. Estos hallazgos han sido publicados recientemente en la revista ‘Journal of Experimental Medicine’.

Este ensayo es pionero a nivel mundial en la aplicación de una terapia con Treg en niños trasplantados, y es el primero en utilizar células thyTreg obtenidas del tejido tímico en lugar de la sangre, lo que permite obtener una mayor cantidad de células de mejor calidad, crucial para la viabilidad de esta terapia avanzada en pacientes pediátricos.

La obtención de células Treg del tejido tímico, un tejido que generalmente se desecha durante las cirugías cardiacas infantiles, ha resultado ser una fuente óptima debido a sus cualidades únicas y altísima capacidad reguladora. Este método permite obtener miles de veces más células que las que se pueden obtener de la sangre.

El trabajo del Laboratorio de Inmuno-regulación del Instituto de Investigación Sanitaria Gregorio Marañón representa un hito en la medicina pediátrica, abriendo nuevas posibilidades para los niños que necesitan trasplantes de corazón y asegurando que puedan acceder a terapias avanzadas y efectivas para mejorar su calidad de vida.

En tiempos de incertidumbre y aislamiento, historias de bondad y conexión humana nos recuerdan la importancia de la empatía y la comunicación. Tal es el caso de Tallulah, una niña británica que, durante la cuarentena por COVID-19, desarrolló una tierna amistad con Tim, un cartero sordo.

Todo comenzó cuando Tallulah y su madre, Amy Roberts, se encontraron con Tim, el repartidor de la compañía Hermes, que pasaba frente a su casa una o dos veces por semana. Tim, que es sordo, enfrentaba desafíos para comunicarse con la mayoría de las personas en su ruta. Sin embargo, Tallulah decidió que quería conocer y hablar con él, pese a la barrera del lenguaje.

Amy, al ver el interés y la bondad de su hija, tomó la iniciativa de enseñarle a Tallulah la lengua de señas británica para que pudiera comunicarse con Tim. Así comenzó una hermosa historia de amistad y aprendizaje.

El vínculo entre Tallulah y Tim se fortaleció cuando la pequeña le dibujó un cartel con la palabra “gracias”. Tim, conmovido por el gesto, decidió llevar el cartel con orgullo en su furgoneta, convirtiéndolo en un símbolo de su conexión especial. Amy compartió esta conmovedora historia en las redes sociales, publicando un video donde explicaba cómo había surgido la amistad y cómo su hija había aprendido la lengua de señas para hablar con su nuevo amigo.

“Al principio del encierro, Tallulah le dibujó un cartel donde ponía ‘gracias’ y todavía lo lleva con orgullo en su furgoneta. Han construido una gran amistad en las últimas semanas”, escribió Amy en el tuit que acompañaba el video. La publicación rápidamente se viralizó, generando múltiples reacciones y destacando la bondad y la empatía de Tallulah.

La historia de Tallulah y Tim tocó el corazón de miles de personas en las redes sociales. Los comentarios elogiaban la iniciativa de la niña y su madre, destacando cómo pequeños actos de bondad pueden tener un impacto significativo en la vida de alguien. Muchos usuarios expresaron su admiración por Tallulah y su capacidad de aprender una nueva forma de comunicación para hacer feliz a otra persona.

Esta historia es un recordatorio poderoso de cómo, incluso en tiempos difíciles, la humanidad puede brillar a través de gestos simples pero significativos. Es un testimonio de la empatía y la solidaridad que pueden florecer en circunstancias adversas y una historia inspiradorapara considerar la importancia de la comunicación inclusiva y el respeto por las diferencias. 

En un avance revolucionario para la medicina, un ensayo en la Universidad de Toledo, Ohio, podría cambiar el destino de millones de personas que sufren de artritis reumatoide. Esta enfermedad crónica autoinmune afecta al 1% de la población mundial, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), y es más prevalente en mujeres y en personas de mayor edad.

La artritis reumatoide es una enfermedad que no solo ataca las articulaciones, como las de las muñecas, manos, pies, columna vertebral, rodillas y mandíbula, sino que también puede provocar problemas serios en el corazón, pulmones, sangre, nervios, ojos y piel. 

El National Institutes Of Health (NIH) la describe como una enfermedad que causa inflamación, dolor, hinchazón y pérdida de función en las articulaciones. Los síntomas incluyen dolor articular, hinchazón, rigidez prolongada, cansancio inusual, fiebre baja ocasional y pérdida de apetito. A pesar de los avances en tratamientos farmacológicos, la artritis reumatoide sigue sin cura definitiva.

Recientemente, científicos de la Universidad de Toledo han desarrollado una vacuna experimental que podría prevenir la aparición de la artritis reumatoide. Este prometedor desarrollo se centra en la proteína 14-3-3 zeta, un componente que ha mostrado resultados alentadores en estudios con animales. Los hallazgos de esta investigación fueron publicados en la prestigiosa revista Proceedings of the National Academy of Sciences.

Sorprendentemente, descubrieron que la supresión de la proteína desencadenaba una aparición más temprana y grave de la artritis reumatoide en modelos animales. Este hallazgo llevó al desarrollo de una vacuna basada en la proteína purificada y cultivada en una célula bacteriana.

Con estos resultados prometedores, el equipo de investigación ha solicitado la patente para su descubrimiento y está buscando socios en la industria farmacéutica para continuar con los ensayos de seguridad y toxicidad necesarios antes de iniciar los ensayos preclínicos en humanos.

Actualmente, la artritis reumatoide se maneja con medicamentos inmunosupresores, antirreumáticos, fisioterapia y, en algunos casos, cirugías. Sin embargo, la posibilidad de una vacuna preventiva representa una esperanza inmensa para aquellos que viven con esta dolorosa y debilitante enfermedad.

Este avance destaca no solo el poder de la ciencia y la investigación, sino también el potencial de la colaboración global en la lucha contra enfermedades crónicas y debilitantes. La esperanza de una vacuna eficaz está más cerca que nunca, prometiendo un futuro en el que la artritis reumatoide pueda ser prevenida, y tal vez, algún día, erradicada.