La captura directa de aire, o DAC, funciona extrayendo dióxido de carbono de la atmósfera y convirtiéndolo en forma sólida o líquida para almacenarlo bajo tierra.

El gigante petrolero saudita Aramco anunció una asociación con Siemens Energy AG para desarrollar una “unidad de prueba” de captura directa de aire (DAC) para gestionar emisiones de CO2.

La colaboración entre Aramco y Siemens Energy se encuentra en sus primeras etapas y dada la adolescencia de DAC, ambas compañías están explorando e invertir en proyectos de tecnología de energía limpia como alternativa. Siemens Energy ha invertido en hidrógeno, energía eólica, fusión nuclear y otros. Mientras tanto, Aramco también tiene proyectos en hidrógeno y energía geotérmica.

Un portavoz de Siemens Energy dijo que una vez que la unidad de prueba esté completa, las empresas considerarán llevar la tecnología a una fase piloto oficial. Sólo después de eso buscarían ampliarlo comercialmente. Se estima que la unidad de prueba este terminada en el 2024 y se construya en Dhahran, Arabia Saudita.

Existe empresas como Amazon que han mostrado interés en esta tecnología, no obstante, muchos expertos dudan de su eficacia, debido a los costos y el tiempo de aplicación, lo que ha creado un clima escéptico sobre su viabilidad como estrategia de reducción de emisiones a largo plazo.

La captura directa de aire, o DAC, funciona extrayendo dióxido de carbono que ya se ha emitido a la atmósfera. El CO2 extraído puede luego condensarse en formaciones sólidas parecidas a piedras o licuarse para almacenarse bajo tierra.

DAC es el método más caro de captura de carbono, según la Agencia Internacional de Energía. Generalmente es más barato eliminar el CO2 en la fuente, antes de que se emita al aire. Las propias máquinas DAC requieren mucha energía para ponerse en funcionamiento, lo que minimiza cualquier reducción de carbono que logren.

Extraer carbono de la atmósfera es atractivo para las empresas con grandes huellas de carbono, porque les permitiría seguir emitiendo con un mecanismo de reversión después del hecho.