La ciencia mexicana vuelve a brillar con un avance que podría cambiar la manera en que entendemos la digestión y el desarrollo de medicamentosInvestigadores de la UNAM han creado un estómago artificial que replica de manera precisa los movimientos y funciones del órgano humano, marcando un hito en la investigación tecnológica y médica.

Este dispositivo, diseñado por los científicos Gabriel Ascanio Gasca y Alberto Caballero Ruiz del Instituto de Ciencias Aplicadas y Tecnología, es capaz de procesar alimentos como salchichas y melón, mientras imita los ciclos naturales del estómago humano. Además, su diseño traslúcido permite observar con detalle cómo se degradan los alimentos medicamentos, revelando un proceso tan fascinante como útil.

¿Para qué sirve exactamente? 

Este estómago artificial no está pensado para trasplantes, ni uso humano, sino para estudiar optimizar la disolución de fármacos y alimentos. “Nuestro dispositivo introduce jugos biliares, reproduce movimientos peristálticos y mantiene presiones similares a las del órgano humano, logrando resultados más precisos”,explicó Ascanio Gasca.

Como dato curioso, el equipo es capaz de generar flujos con presiones extremadamente bajas, similares a los 20-25 milímetros de mercurio que ocurren en el cuerpo humano; ñp que permite que la digestión suceda sin que la sintamos. Los investigadores lograron imitarlo con gran exactitud.

Ahora los expertos trabajan en replicar las funciones del duodeno, la siguiente etapa en la digestión, para estudiar cómo se asimilan nutrientes y suplementos nutricionales.

Este avance no solo coloca a México en el mapa de la innovación científica, sino que abre la puerta a nuevos métodos para desarrollar medicamentos más eficientes y comprender mejor la relación entre la alimentación y la salud.