Bélgica marca un hito por la libertad de los delfines al dar un paso revolucionario en la defensa de los derechos de los animales al prohibir los delfinarios en todo el país. Con esta medida, se convierte en el séptimo país del mundo y el cuarto de Europa en adoptar una posición firme contra el cautiverio de delfines.

El Boudewijn Seapark, el último delfinario del país, ubicado en Brujas, cerrará sus puertas definitivamente a más tardar en 2037. Pero este no es solo el fin de una era; es el inicio de un nuevo capítulo para los delfines que, hasta ahora, han vivido confinados en piscinas artificiales.

Delfines LibresNo en escenarios”. Detrás de esta decisión está el arduo trabajo de la organización GAIA, que durante tres décadas ha luchado para poner fin al sufrimiento de los delfines en cautiverio. Con esta normativa, se prohíben tanto la reproducción como la importación de delfines, marcando un precedente que muchas otras naciones podrían seguir.

Los planes para trasladar a estos animales a reservas marinas en el futuro son un rayo de esperanza. En estas reservas, los delfines podrán experimentar condiciones más cercanas a su hábitat natural, disfrutando de semilibertad, algo que les permitirá vivir de una forma más digna.

Expertos como Jane Goodall Richard O’Barry han sido claros: los delfines son seres increíblemente inteligentes y sociales, diseñados para recorrer hasta 100 kilómetros diarios y sumergirse a profundidades de 200 metros. En cautiverio, su mundo se reduce a una piscina miles de veces más pequeña que su hogar natural. Este confinamiento genera estrés, frustración y comportamientos anómalos.

Si bien la transición no será inmediata, Bélgica ha demostrado que es posible priorizar el bienestar animal. Esta decisión no solo beneficia a los delfines, sino que también envía un poderoso mensaje: es momento de replantearnos cómo interactuamos con los animales y su lugar en el mundo.

Desde organizaciones como GAIA FAADA, el trabajo continúa. “Esperamos que este ejemplo inspire a otros países, incluida España, a poner fin a los delfinarios y a defender la libertad de los cetáceos en todo el mundo”, afirman los activistas.

¿Te imaginas un futuro con delfines libres, océanos llenos de vida y un mundo más consciente?