En un histórico día para el bienestar animal en el estado de Puebla, el Congreso aprobó por unanimidad una serie de reformas legislativas destinadas a proteger a las criaturas más vulnerables de nuestra sociedad. Estas medidas, que incluyen la tipificación de la zoofilia como un delito contra los animales, la eliminación de los sacrificios en los Centros de Bienestar Animal y sanciones más severas para el maltrato, marcan un hito significativo en la lucha por la justicia y el respeto hacia los seres sintientes que comparten nuestro planeta.

Entre las reformas más destacadas se encuentra la inclusión de los animales como seres sintientes en la legislación, reconociendo así su capacidad para experimentar emociones y sentir dolor. Esta medida no solo representa un avance ético, sino que también establece una base sólida para la protección y el cuidado adecuado de todas las especies animales.

Además, se ha dado un paso crucial al tipificar la zoofilia como un delito grave contra los animales. Actos de crueldad como estos, que atentan contra la integridad física y emocional de los seres vivos, ahora serán castigados con penas que van desde 1 hasta 4 años de prisión, acompañadas de multas considerables. Esta enérgica respuesta legal envía un mensaje claro: en Puebla, el abuso hacia los animales no será tolerado.

Otro logro importante de estas reformas es la transformación de los Centros de Atención Canina en Centros de Bienestar Animal, donde se promueve el cuidado, la adopción y la rehabilitación de los animales en situación de calle. La eliminación de los sacrificios de animales no rescatados es un paso esencial hacia una sociedad más compasiva y responsable.

Estas iniciativas legislativas no habrían sido posibles sin el arduo trabajo y la dedicación de personas como Elena Larrea, una incansable defensora del bienestar animal cuyo legado perdurará en cada vida que haya tocado. El reciente fallecimiento de Larrea ha dejado un vacío en la comunidad activista, pero su espíritu perdura en cada rescate, en cada animal que recibe una segunda oportunidad gracias a su valiente labor.

El caso de Mila, la potranca rescatada por Larrea, es un testimonio conmovedor del poder transformador del amor y la dedicación. A pesar de haber sido víctima de abuso y zoofilia, Mila encontró refugio en Cuacolandia, donde recibió el cuidado y la atención necesarios para su recuperación. Su historia es un recordatorio de la importancia de defender a aquellos que no pueden hacerlo por sí mismos.

Es fundamental destacar el papel crucial que juega la sociedad en la protección de los animales. El cambio legislativo es solo el primer paso; ahora, es responsabilidad de cada individuo promover el respeto y la compasión hacia todas las formas de vida. 

Los delitos de maltrato animal y zoofilia en Puebla, obtuvieron diversas sentencias que van desde los 10 meses hasta los 13 años de prisión:

  • Maltrato animal: de 10 meses a 8 años de prisión y multas de hasta 43 mil 456 pesos
  • Peleas de perros: de 2 a 5 años y multas de 43 mil 428 pesos
  • Dejar mascotas encerradas o en el techo en condiciones críticas: hasta 13 años de cárcel
  • Zoofilia: de 1 a 4 años y multas por hasta 43 mil 428 pesos

Desde adoptar en lugar de comprar mascotas hasta denunciar casos de maltrato animal, cada acción cuenta en la construcción de un mundo más justo y compasivo para todos.

La aprobación de estas reformas representa un avance significativo en la protección y el bienestar de los animales en el estado de Puebla. A través de medidas legislativas sólidas y el compromiso de la sociedad civil, estamos construyendo un futuro en el que todas las criaturas puedan vivir libres de sufrimiento y en armonía con su entorno.

Ante la preocupación por el abandono masivo de animales de compañía en Francia, aprobó la propuesta de ley para “luchar contra el maltrato animal”, la cual prohíbe la venta de crías de perros y gatos en las tiendas de animales y la presencia progresivamente de animales salvajes en circos. 

El trámite parlamentario finalizó en el Senado francés con el apoyo al texto de 332 votos, frente a solo uno en contra y diez abstenciones, lo que pone en evidencia el elevado grado de consenso, que también se había dado en la Asamblea Nacional.

La propuesta por el Senado, tras el visto bueno del Parlamento, endurece así las penas por maltrato o abandono. Se estima que de cada dos ciudadanos, un francés posee un animal de compañía, pero cada año se abandonan unos 100,000. 

Para evitar las compras impulsivas, los futuros dueños de los animales deberán obtener siete días antes un “certificado de sensibilización” en el que se recuerdan las obligaciones para su cuidado como la atención veterinaria y de vacunación, así como los costos derivados.

El hecho de matar o maltratar voluntariamente a un animal de compañía pasará a estar considerado un delito y no una simple infracción. Los condenados por malos tratos deberán asistir a un curso de sensibilización.

El maltrato estará castigado con penas de hasta tres años de cárcel y 45.000 euros de multa en caso de muerte, así como de la retirada de la autorización para tener otras mascotas.

Los animales de compañía no son “ni juguetes, ni bienes, ni productos de consumo”, escribió el ministro de Agricultura, Julien Denormandie, en su red social y celebró “un importante avance” en la lucha contra el abandono de estos animales.

La venta de crías de perros y gatos en tiendas de animales estará prohibida a partir del 1 de enero de 2024. Estos ya no podrán exponerse en los escaparates y su venta en línea estará mejor regulada.

Ademá ya no se podrán exhibir los mil animales salvajes presentes en los 120 circos itinerantes dentro de dos años ni poseerlos dentro de siete. En el caso de los delfinarios en Francia, que cuentan con 21 delfines y 4 orcas, ya no podrán poseer estos cetáceos en el plazo de cinco años.

La Fundación Brigitte Bardot, una de las asociaciones más movilizadas en la defensa de los derechos de los animales en Francia, ha calificado la ley de “histórica” y que al parecer el país empieza a crecer con las nuevas generaciones y los países más civilizados de Europa.