En un rincón del norte del planeta, donde los inviernos parecen eternos y los bosques dominan el paisaje,hay un país que se ha convertido en ejemplo de cómo sí se puede vivir en armonía con la naturalezaFinlandia. Este lugar no solo es conocido por sus auroras boreales o su silencio sereno, sino por haber logrado algo que muchos países apenas sueñan: tener agua limpiaaire sano y bosques que crecen más de lo que se cortan.

Finlandia tiene un secreto poderoso: información ambiental precisa, tecnología avanzada decisiones que piensan en el mañana. A esto se le suma una población pequeña, una naturaleza poco intervenida y muchas ganas de prevenir antes que lamentar. Porque aquí se entiende que dañar el medioambiente no solo cuesta dinero… cuesta tiempo, salud y futuro.

El cambio se ve y se siente. Ríos contaminados fueron restaurados, lagos eutrofizados se limpiaron tras décadas de esfuerzo, y hasta las emisiones de las industrias se redujeron drásticamente. Hoy, el 80% del agua en sus lagos es de calidad excelente o buena. No es magia. Es inversión, constancia y respeto por algo que no se recupera fácilmente si se pierde.

Sus bosques cubren más del 70% del país. No solo son muchos, sino que crecen más de lo que se tala. Hay más de 1.7 millones de hectáreas de bosques completamente protegidos, y el resto se cuida como si fueran joyas verdes. Porque sí, los árboles aquí son más que madera: son vida, oxígeno, identidad.

A pesar de seguir usando gas, carbón y combustibles fósiles, Finlandia se ha trazado metas claras: apostar cada vez más por energías limpias como la solar, la eólica o la geotérmica. Aunque estas últimas aún no dominan el panorama, su expansión está en marcha, especialmente para calentar hogares de forma más verde.

En un mundo donde la crisis climática ya no es una advertencia sino una realidad, Finlandia no da discursos: da el ejemplo. Y demuestra que si un país frío y rocoso puede hacerlo, ¿por qué no los demás?. A veces, el cambio empieza por mirar y ponerse en acción.

Imagina que te dicen: “Vamos a construir una carretera de 550 kilómetros… ¡en medio de un desierto gigante donde ni las sombras se atreven a quedarse!”. Suena a locura, ¿no? Bueno, en China no solo lo imaginó: lo hizo realidad. Y no solo eso, además le plantaron un bosque completo a cada lado. 

La historia comienza en el desierto de Taklamakán, conocido como “el mar de la muerte”. Un lugar donde las tormentas de arena pueden tragarse una carretera como si fuera un juguete, y donde las temperaturas cambian de +50°C a -40°C sin previo aviso. Aquí, donde la vida parece imposible, nació la autopista de Tarim.

¿Pero cómo haces para que una carretera sobreviva donde todo parece destinado a desaparecer bajo la arena? China apostó por la naturaleza: no para vencerla, sino para domarla. Más de 3.000 hectáreas de vegetación fueron sembradas a ambos lados del asfalto. Matorrales y árboles alineados como soldados verdes formando una muralla viviente de 70 metros de ancho y 400 kilómetros de largo.

Sí, un bosque artificial completo en uno de los desiertos más extremos del planeta. Y no es solo por estética. Este cinturón verde actúa como escudo, evitando que el viento y la arena sepulten la vía. ¿Cómo sobrevive? Gracias a cientos de pozos que bombean agua desde un acuífero subterráneo, usando un sistema de riego diseñado con precisión quirúrgica.

Pero hay más: cada 4 kilómetros hay pequeñas estaciones donde viven los trabajadores encargados de cuidar este ecosistema. Viven en pareja, aislados, y solo pueden estar allí por dos años debido a lo extremo del clima. No hay lujos, ni comodidades… pero sí un propósito gigante: que esta carretera nunca desaparezca.

Lo que comenzó como una idea casi imposible hoy es una maravilla de ingeniería y biotecnología. Una lección de cómo, a veces, para sobrevivir al desierto, hay que sembrarlo. Y sí, los árboles también pueden ser héroes.

Por años, el Papa Francisco no solo llevó una sotana blanca, sino también una bandera verde, una que ha ondeó desde el mismísimo Vaticano hasta los foros más importantes del planeta: la bandera de un planeta en crisis.

Sí, el mismo que en 2013 rompió moldes al ser el primer Papa latinoamericano, el mismo que eligió llamarse Francisco en honor a San Francisco de Asís —el santo que hablaba con los animales y sentía a la Tierra como hermana—, también fue el primero en poner a la ecología en el centro del altar.

En 2015, con solo dos años como líder de la Iglesia, lanzó Laudato si, la que hoy se conoce como “la encíclica verde”. En ese texto, sin rodeos, soltó una verdad que aún resuena: “La Tierra, nuestra casa, parece convertirse cada vez más en un inmenso depósito de porquería”.

¿Duro? Sí. ¿Necesario? También.

En una era en la que muchos líderes aún se tropiezan con el cambio climáticoFrancisco no se quedó en discursos decorativos. Desde Nairobi hasta París, desde el Vaticano hasta la COP28 de Dubái (aunque esta última por videoconferencia, debido a su salud), su mensaje fue claro: cuidar el planeta no es una moda, es un deber moral.

“No podemos ignorar esta elección: o mejoramos o destruimos el medio ambiente”, dijo ante la ONU.

Y lo repitió una y otra vez: “Todo daño al ambiente es un daño a la humanidad”.

Francisco no habló de reciclaje o bolsas reutilizables sino algo más profundo: de un sistema que explota la naturaleza como si fuera infinita, de decisiones políticas que anteponen el dinero al bienestar común, y de un mundo que parece haber olvidado que los más pobres son quienes más sufren la devastación ambiental.

En 2023, ocho años después de Laudato si, publicó Laudate Deum, una segunda llamada de emergencia al mundo. En ella advirtió que ya estamos “cerca de un punto de no retorno” y criticó a quienes siguen negando el cambio climático con burlas “irresponsables”.

Hasta en pequeños gestos —como aceptar un papamóvil” eléctrico—, predicó con el ejemplo. Porque para él cada acción contaba.

Puede que no todos compartan su fe, pero si algo ha dejado claro es que Francisco es fue y será un líder que nos enseñó que cuidar la Tierra no es una causa religiosa, es una causa humana. Y como dijo en una ocasión: “La destrucción del medio ambiente es una ofensa a Dios… y una amenaza para todos”.

Quizá, si más líderes pensaran así, el planeta respiraría un poco mejor.

Gracias por tu legado verde.

¿Te imaginas que tu doctor te recete un paseo por el bosque en lugar de pastillas

En Japón esto ya es una realidad, y se llama Shinrin-Yoku o “baño de bosque”. No, no necesitas agua ni jabón, solo caminar entre árboles, respirar profundo y desconectar del estrés. Suena bien, ¿no?

Desde la década de los 80, los japoneses han demostrado que esta práctica reduce la presión arterial, fortalece el sistema inmunológico y combate la ansiedad. Los efectos secundarios son energía y paz.

Investigadores han comprobado que caminar por la naturaleza disminuye la hormona del estrés (cortisol)hasta un 12,4%, baja la presión arterial y hasta reduce el riesgo de infartos. ¿Por qué sucede esto? Debido a que nuestro cerebro evolutivamente está diseñado para sentirse bien en entornos naturales.

El secreto está en los aromas naturales de los árboles, como el cedrol o el limoneno, que refuerzan nuestras defensas y ayudan a combatir enfermedades. Corea del Sur y Finlandia también han adoptado esta terapia, invirtiendo millones en centros especializados.

No solo en Asia se ha vuelto popular. En Estados Unidos, más de 800.000 personas se sumaron al senderismo en 2022. En México ya existen empresas como Senderismo Trail especializadas en llevar grupos a practicar el senderismo como actividad recreativa o deportiva. Caminar al aire libre no solo mejora la salud física, sino que también potencia la memoria, la creatividad y reduce la depresión

Ya sabes, la próxima vez que necesites relajarte, deja tu celular, sal y disfruta de la naturaleza y permita que esta haga su magia. 

Nestlé México marcó un hito en el camino hacia la sostenibilidad al celebrar el Primer Foro de Agricultura y Ganadería Regenerativa, un evento donde innovación y compromiso ambiental se unieron para transformar la producción de alimentos.

En colaboración con el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), Nestlé reunió a líderes del sector para compartir técnicas revolucionarias como el uso de biofertilizantes derivados de estiércol y la optimización de dietas ganaderas para reducir emisiones de carbono.

“La agricultura regenerativa no es solo una tendencia, es el futuro que necesitamos construir juntos”, declaró Jorge Mario Ortega, Director Agropecuario de Nestlé México, destacando la importancia de estas prácticas para combatir el cambio climático.

El foro también fue un espacio para aplaudir el esfuerzo de los productores agrícolas y ganaderos que han adoptado métodos regenerativos en sus procesos. Los reconocimientos entregados celebraron su papel como agentes de cambio en sus comunidades. “Son nuestros mejores aliados para regenerar el suelo, el agua y el aire”, afirmó Ana Cristina Tovalin, Gerente de Sostenibilidad de Nestlé México.

Entre los logros destacados se encuentran los ensayos en agricultura regenerativa realizados en 2023, los cuales han demostrado que es posible mejorar la calidad de los productos mientras se protege el medio ambiente. “Este foro es solo el principio de una transformación en la cadena alimentaria”, enfatizó Enrique González, Gerente de Agricultura Regenerativa de Nestlé.

Con iniciativas como esta, Nestlé México refuerza su compromiso con un futuro más sostenible, demostrando que la innovación y el respeto por la naturaleza pueden ir de la mano. Cada elección cuenta, y los héroes del campo están liderando la revolución verde.

La moda está cambiando, y no solo en términos de estilo. Hoy en día, cada vez más consumidores, especialmente los jóvenes, buscan algo más que solo un buen diseño: quieren productos responsables con el medio ambiente. En este contexto, Yuccs, una marca española, ha dado un gran paso adelante al incorporar caña de azúcar en sus zapatillas, transformando el calzado como lo conocemos.

“Es como caminar por las nubes,” afirma Pablo Mas, fundador de Yuccs, sobre sus suelas innovadoras Sugarcloud™. Estas suelas no son solo una maravilla tecnológica, sino también un acto de responsabilidad ambiental. Mientras otras marcas se limitan a decir que respetan la naturaleza, Yuccs va un paso más allá. “No creemos en las tendencias efímeras, sino en un compromiso firme con el planeta,” agrega Mas.

La caña de azúcar, conocida por su rápido proceso de regeneración y sus propiedades autosuficientes, es el protagonista de esta revolución. La fábrica que procesa este material se alimenta de la bioelectricidad generada durante su transformación. Además, la caña de azúcar no solo se usa para hacer azúcar, sino que también reemplaza productos con alto impacto ecológico como el cemento y se recicla para abono o alimento animal.

Este enfoque no solo es ecológico sino también práctico. Las suelas Sugarcloud™ son resistentes, ultra-ligeras y extremadamente cómodas. “Estamos continuamente investigando nuevas formas de ofrecer productos sostenibles y diferentes,” destaca Mas. Yuccs se compromete a seguir innovando y adaptándose a las exigencias de un consumidor cada vez más consciente.

Así que, si quieres estar a la moda mientras cuidas del planeta, Yuccs te ofrece la oportunidad de dar pasos ligeros y verdes. La moda consciente no es una moda pasajera, sino una realidad que Yuccs está haciendo posible con cada par de zapatillas. ¿Te atreverías a caminar con una sensación de estar sobre nubes y a la vez salvando al planeta?

En Japón, la naturaleza ha creado un escenario que parece sacado de un sueño: una playa donde la nieve, la arena y el mar se encuentran en perfecta armonía. Este lugar es la playa Tottori, conocida como la “Playa de los Diamantes”, ubicada en la isla de Hokkaido. La magia de esta playa radica en la apariencia brillante de sus granos de arena mezclados con la nieve, creando un efecto visual que recuerda a diamantes esparcidos por toda la costa.

La isla de Hokkaido, la más septentrional de las islas principales de Japón, es famosa por sus volcanes, termas naturales y zonas de esquí. Sin embargo, uno de sus atractivos más sorprendentes es la playa de Toyokoro, también conocida como Toyokoro Ice Beach. Esta playa se encuentra al sureste de Hokkaido y, hasta hace poco, era una zona tranquila y poco frecuentada. Hoy en día, se ha convertido en un destino turístico muy popular, especialmente entre fotógrafos y exploradores que buscan capturar el fenómeno natural conocido como ‘hielo joya’.

El fenómeno del hielo joya es un espectáculo visual que se produce cuando los bloques de hielo del río Tokachi se congelan lentamente, permitiendo que se formen sin burbujas de aire en su interior. Este proceso de congelación lenta y cuidadosa da lugar a piezas de hielo transparentes y pulidas, que al combinarse con la luz del amanecer o el atardecer, adquieren una apariencia que recuerda a joyas preciosas.

Durante los meses de enero y febrero, las aguas del río Tokachi se congelan debido a las bajas temperaturas. Estos bloques de hielo imponentes se fracturan y son arrastrados hacia el océano, donde son pulidos naturalmente por las mareas antes de llegar a la playa. Una vez allí, se asientan sobre la arena, creando una vista impresionante cuando se combinan con la nieve y el mar. La transparencia de las piezas de hielo, junto con la luz dorada del sol, hace que el paisaje sea aún más espectacular y sobrecogedor.

El proceso de formación del hielo joya es meticuloso. La congelación rápida del agua usualmente resulta en la formación de burbujas, pero en Toyokoro, el lento proceso de congelación permite que las impurezas y el aire salgan a la superficie, resultando en bloques de hielo perfectamente pulidos y uniformes. Este fenómeno natural requiere condiciones específicas para su creación, lo que lo hace aún más especial y raro.

La fina franja de arena que queda entre la nieve y el mar en Toyokoro es de una belleza majestuosa, añadiendo un elemento adicional al ya impresionante espectáculo del hielo joya. Para quienes no pueden viajar a Japón, las redes sociales ofrecen una ventana a este fenómeno, permitiendo que personas de todo el mundo aprecien su belleza única.

La playa Tottori y el fenómeno del hielo joya en Toyokoro son ejemplos asombrosos de cómo la naturaleza puede sorprendernos y dejarnos sin palabras. Estos lugares no solo son un testimonio de la belleza del mundo natural, sino también un recordatorio de la importancia de preservar y apreciar estos espectáculos únicos.

En el vasto reino submarino, una criatura única y asombrosa ha cautivado la atención del mundo: la estrella de plumas. Con sus brazos parecidos a plumas y una antigüedad que se remonta a unos 200 millones de años, esta criatura es un verdadero tesoro de la naturaleza que habita en diversos entornos marinos alrededor del globo.

Las imágenes recientes de Tailandia nos brindan una visión encantadora de la vida de esta extraordinaria criatura. Con movimientos elegantes y colores vibrantes, nos transporta a un mundo antiguo, ofreciendo un atisbo de cómo era la vida hace millones de años.

El descubrimiento de esta peculiar especie marina ha causado sensación en las redes sociales, donde se le ha comparado con un ser de otro planeta debido a su aspecto inusual. Aunque su apariencia puede ser desconcertante para algunos, la estrella de plumas es un ejemplo excepcional de la diversidad y la belleza del mundo marino.

Con su característico color marrón y sus movimientos gráciles, la estrella de plumas parece desafiar las convenciones de la vida marina. En un video viral, podemos apreciar cómo sus plumas flotan y se mueven con delicadeza en el agua cristalina, creando una escena hipnótica y fascinante.

Esta criatura, perteneciente a la clase crinoideo de animales marinos, es famosa por sus brazos plumosos, que utiliza para alimentarse. Aunque su apariencia se asemeja a la de una estrella de mar, la presencia de plumas le otorga un aura de misterio y belleza única.

El avistamiento de una estrella de plumas en plena natación es un acontecimiento poco común, ya que estas criaturas suelen moverse arrastrándose en la superficie del agua. Sin embargo, cuando se sienten en peligro o buscan alimento, despliegan sus brazos y comienzan a nadar con gracia y determinación.

Este encuentro cercano con una de las especies más antiguas del planeta es un recordatorio de la asombrosa diversidad de la vida marina y la importancia de proteger y preservar nuestros océanos. En un mundo donde la belleza y el misterio se entrelazan en cada rincón del mar, la estrella de plumas brilla como una verdadera joya de la naturaleza, recordándonos la magia que yace bajo la superficie de las aguas.

En el mundo de la botánica, a veces la naturaleza nos sorprende con creaciones que desafían nuestra comprensión. Tal es el caso de la enigmática Crotalaria cunninghamii, una planta nativa de Australia que ha dejado boquiabiertos a científicos y aficionados por igual con su extraordinaria similitud con los colibríes.

¿Cómo una simple planta puede adoptar la apariencia de una de las aves más fascinantes del mundo? La respuesta nos lleva a explorar los misterios de la evolución y la percepción humana.

Con sus flores delicadas que se asemejan a un grupo de colibríes verdes en pleno vuelo, la Crotalaria cunninghamii ha generado un alboroto en las redes sociales y más allá. Sin embargo, los científicos son cautos al atribuir este fenómeno al mimetismo. A pesar de la asombrosa semejanza, los expertos como Michael Whitehead de la Universidad de Melbourne sugieren que podría tratarse simplemente de una casualidad. “Las flores se parecen a un colibrí para los humanos, pero ningún otro animal las ve como nosotros”, señala Whitehead, refutando la noción de que la planta haya evolucionado específicamente para imitar a las aves.

La teoría del mimetismo, aunque seductora, encuentra obstáculos en la realidad biológica. En Australia, donde habita la Crotalaria cunninghamii, no existen colibríes. Además, la falta de evidencia concreta sobre los polinizadores de la planta plantea interrogantes sobre su supuesta adaptación para atraer aves. Sin embargo, la naturaleza nos brinda ejemplos sorprendentes de pareidolia, un fenómeno en el que nuestro cerebro percibe formas reconocibles en estímulos aleatorios. Como la famosa “flor del beso” o “labios de mujer”, Psychotria elata, cuyas flores se asemejan a unos labios carnosos.

Carlos Magdalena, conocido como “el Mesías de las Plantas“, ofrece una perspectiva similar al afirmar que las características de la flor son más resultado de la casualidad que de la evolución dirigida. En un mundo donde la diversidad floral es asombrosa, es plausible que la Crotalaria cunninghamii simplemente haya encontrado una forma única de cautivar nuestra imaginación.

Este enigma botánico nos recuerda la importancia de mantener una mente abierta en nuestras exploraciones científicas. A veces, la belleza y la magia de la naturaleza superan nuestras explicaciones racionales. En lugar de intentar encajar cada fenómeno en una teoría preconcebida, quizás deberíamos deleitarnos con la maravilla de lo desconocido y permitir que la curiosidad nos guíe hacia nuevos descubrimientos.

Imagina un mundo donde las plantas crecen y se desenvuelven sin necesidad de tierra, donde la vida vegetal se convierte en una danza constante de crecimiento y renovación. Esto es exactamente lo que ofrece Terraplanter, una innovadora creación que redefine la forma en que cultivamos y experimentamos la naturaleza en nuestros hogares.

Concebido por tres mentes creativas y apasionadas: Roy Burko, un experto en tecnología y amante de los videojuegos; Eran Zarhi, un diseñador visionario; y Elad Burko, un emprendedor comprometido con el medio ambiente, Terraplanter representa la convergencia perfecta entre la tecnología, el diseño y la sostenibilidad.

Terraplanter es mucho más que una simple maceta; es un sistema hidropónico permeable que permite que las plantas crezcan directamente en su superficie, sin necesidad de tierra. Su material cerámico patentado ofrece la cantidad óptima de porosidad y características higroscópicas, facilitando la difusión del agua a través de la estructura y proporcionando un ambiente ideal para el crecimiento de las plantas.

Lo fascinante de Terraplanter es su capacidad para hacer visible el proceso de crecimiento de las plantas. Desde el momento en que las semillas germinan hasta que las raíces se aferran y se expanden en busca de agua, cada etapa del ciclo de vida vegetal se convierte en un espectáculo de belleza y asombro. Al fotografiarlas cada dos minutos, se revela la magia del proceso natural por el que pasan, una danza continua de movimiento y vida.

Su diseño elegante y minimalista lo convierte en una adición estilizada a cualquier espacio interior, transformando las plantas en esculturas vivientes que llenan de inspiración y gracia el ambiente del hogar.

Terraplanter es más que una maceta; es un objeto para celebrar la vida y la belleza de la naturaleza. Es una invitación a conectar más profundamente con el mundo natural que nos rodea, a apreciar la paciencia y la belleza de cada proceso de crecimiento. Descubre más sobre esta emocionante innovación en www.terraplanter.com