Desde el 2017, el Sargazo se ha convertido en un tema muy fuerte para el caribe mexicano.

¿Qué es el Sargazo? Son algas marinas color marrón que al descomponerse tiene un aroma desagradable.

¿De dónde viene? En el Océano Atlántico existe mar adentro un lugar al que se le conoce como: El mar de los sargazos y según la hipótesis de científicos y biólogos, el calentamiento global que hoy estamos viviendo, ha provocado que los mares tengan una cantidad excesiva de nutrientes, lo que ha provocado que el Sargazo se desprenda del fondo del mar y viaje kilómetros, hacia dónde lo lleve el viento.

Este Sargazo que vemos en las playas caribeñas se ha convertido en un problema ambiental. Solo este 2019 se espera la llegada de más de 1 millón de toneladas de Sargazo a territorio mexicano. Las imágenes las hemos visto, dolorosamente Cancún perdió este color turquesa y se ha vuelto marrón y los hoteleros están perdiendo turistas y muchos animales están muriendo como las tortugas, tiburones, cientos de peces.

Pero en medio de esta horrible noticia hay algo bueno que contar porque los mexicanos, ingeniosos como siempre, han comenzado a encontrarle un uso a este material que llega de lo más profundo del océano.

Resulta que un emprendedor ambiental, llamado Omar Vázquez, comenzó a hacer ladrillos de Sargazo, usando la misma técnica que se utiliza para hacer los ladrillos de adobe. Y con ellos construyó una primera casa a la que llamó “Angelita” en honor a su mamá.

De acuerdo a lo que el mismo cuenta estás casas tienen un efecto térmico, cuando hace frío son calientitas y cuando hace calor son frescas y lo más importante, son económicas.

Al día de hoy, Omar y su empresa han construido ya 4 casas, 3 de ellas las han regalado a personas de escasos recursos y ha Sido una idea tan revolucionaria que la misma UNAM ha hecho un estudio en el que le da la legalidad de que sus ladrillos son resistentes y duraderos y la Secretaria de Desarrollo Social del estado de Yucatán está interesada en crear un proyecto piloto de construcción de estas casas.

Con una condición envidiable y una actitud que enamora, el perrito “Cactus” se convirtió en uno de los 50 mejores maratonistas, al concluir de manera destacada, el Maratón de Sables o Maratón de las Arenas, que se celebra cada año en el Desierto del Sahara y que es, sin duda, uno de los más extenuantes y difíciles de todo el mundo. Fue tan bueno el trabajo físico realizado por el pequeño can, que los organizadores decidieron otorgarle una medalla.

El ultramaratón es conocido como la carrera a pie más dura del planeta por su distancia y por las condiciones climáticas a los cuales los corredores son expuestos. Durante siete días se recorre una distancia de 250 kilómetros entre arena y piedras.

Atletas de varios países se inscribieron a esta justa deportiva, quienes de acuerdo con los organizadores, recibieron y acogieron al pequeño “Cactus” y se encargaron de hidratarlo a lo largo del recorrido.

El pequeño campeón recorrió 120 de los 250 kilómetros que consiste la prueba. Posteriormente recibió atención veterinaria y confirmaron el perfecto estado de salud del perro.

La naturaleza nos dio otra oportunidad.

Un guacamayo o papagayo azul, especie que se hizo famosa gracias a la película “Río” de la casa productora DreamWorks, y que se creía extinta hace algunos años,  ha nacido en un taller de aves manejado por la ONG Asociación de Ornitófilos y Afines (Asora) en la ciudad de Luque, en Paraguay y gracias a su nacimiento, la especie ha dejado de ser declarada como extinta. Al parecer la madre naturaleza, no quiere que este animalito exótico desaparezca de la faz de la tierra.

La asociación civil, contaba con apenas 150 ejemplares de guacamayo azul en cautiverio, y según lo que declaró Gustavo Espíndola, (que es el líder del proyecto) a diferentes medios de comunicación locales, la pequeña cría nació en perfecto estado de salud.

Con su llegada al planeta, ha nacido también una segunda oportunidad para la raza humana, que si sabemos aprovecharla, permitirá que nuevas generaciones, puedan ver con sus propios ojos al ave azul, volar por el cielo.

… Y a las colillas de los cigarros ¡También!

¡Buenas noticias para el planeta! Con el objetivo de ayudar a limpiar los océanos, la Unión Europea aprobó una legislación que prohíbe el uso de plásticos de un solo uso a partir de 2021 y estableció también la meta de recolectar y reciclar el 90 por ciento de las botellas de plástico para el 2029.

Los artículos de plástico desechables como platos, cubiertos, cotonetes y popotes en los países que integran el bloque serán los que no podrán volver a ser comprados, usados y por ende desechados, buscando con ello reducir el impacto que generan en el medio ambiente.

Según el Consejo Europeo, este tipo de plásticos y productos representan más del 70 por ciento de la basura marina, cuyos residuos son ingeridos la mayoría de las veces por especies como las tortugas, ballenas, peces y aves, provocándoles la muerte.

Pero esta iniciativa en pro del planeta, no se quedará solo en plásticos, sino que la industria tabacalera tendrá que sumarse, ya que de acuerdo con la nueva legislación aprobada y bajo el principio: “Quien contamina paga” las industrias dedicadas a la producción de cigarros tendrán que cubrir los costes de recogida y reciclado de los filtros restantes, filtros que según estudios, ocupan el primer lugar en contaminantes del planeta.

Sin lugar a dudas es un gran reto, pero un desafío que le dará un respiro al planeta.

 Jonathan Cristhan Sánchez, es un joven de 20 años, que nació y creció en el municipio Tultepec, en el estado de México, estudia la carrera de Ingeniaría en Aeronáutica y fue nombrado el segundo lugar del Programa Internacional del Aire y el Espacio, promovido por la NASA.

El concurso que lanzó la agencia espacial fue con el objetivo de encontrar personas que pudiera crear un material resistente a la radiación solar.

Fue así que Jonathan y su equipo, se pusieron a trabajar y crearon una aleación de recina con fibra de carbono, el cual cumplió el objetivo y se le presentó a la NASA.

Este concurso lo acerca a su sueño desde niño, quees convertirse en astronauta, para poder conocer el espacio exterior, tal y como lo hizo en su momento Rodolfo Neri Vela.

 “Uno de mis grandes sueños es ser astronauta, estoy enamorado del tema del cosmos la Nasa,del hombre en la luna”, dijo.

Esta es la segunda vez que Jonathan compite en este concurso. La primera vez, presentó  una iniciativa, con el objetivo de estimar posibilidades de vida en el planeta Júpiter por medio de las mejoras a un satélite que pudiera rondar el planeta. En aquella ocasión, obtuvo también, el segundo lugar.